Este jueves, la Cámara de Diputados inició la discusión de la reforma propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que busca transferir el control de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Aunado a lo anterior, el dictamen en debate modifica 12 artículos de la Constitución, estableciendo que el titular de la Guardia Nacional sea un general de División del Ejército, así como que su integración esté compuesta por militares y marinos. Además, la reforma otorgará a la Guardia Nacional la facultad de investigar delitos dentro de su competencia.
Durante la sesión, la diputada Laura Ballesteros, del partido Movimiento Ciudadano, presentó una moción suspensiva para detener la discusión, argumentando que esta reforma refleja el “constitucionalismo abusivo de Morena” y pretende militarizar el país. Sin embargo, su propuesta fue desechada por la mayoría de Morena y sus aliados.
Asimismo, Ballesteros expresó: “El día de hoy intentan nuevamente imponer su constitucionalismo abusivo con la reforma para consumar la militarización de la Guardia Nacional. Presentó esta moción suspensiva porque esta reforma tampoco puede ser votada”.
En tanto, Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara, rechazó las acusaciones de militarización que han surgido tanto de organizaciones como Amnistía Internacional como de diputados de oposición, y aseguró que la reforma beneficiará la seguridad en estados como Sinaloa, Chiapas y Zacatecas, que enfrentan altos niveles de violencia.
“El reconocimiento constitucional de la Guardia Nacional permitirá actuar en labores de seguridad pública como fuerza armada permanente. También le otorgamos capacidad de persecución de delitos junto al Ministerio Público”, afirmó.
Por último, la discusión se anticipa extensa, pues Monreal Ávila informó que se prevén cuatro rondas de debate en lo general, con la posibilidad de que el número aumente a medida que avance la sesión.
Con información de El Sol de México
*ARD