El incremento de contagios de Covid-19 registrado en los últimos días en la CDMX inmediatamente se reflejó en los kioscos de pruebas. Luego de que por algún tiempo se dejaron de ver filas de personas esperando realizarse el test, éstas ya comenzaron a aparecer en el transcurso de la semana.
Datos de El Universal señalan que en el Centro de Salud T-III Beatriz Velasco Alemán, en las últimas 72 horas, el número de solicitudes para la prueba se ha incrementado, pues de aplicarse la semana pasada un promedio de 80 al día, este miércoles se disparó a 120, y no se logró cubrir la demanda, pues para las 10:30 horas todavía había gente queriendo hacer el estudio. Los que alcanzaron fueron los que llegaron muy temprano, pero tuvieron que esperar más de tres horas.
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La temporada invernal y la aparición de la variante ómicron pusieron en alerta a la población y a las autoridades capitalinas. Estas últimas decidieron tomar medidas para evitar la propagación durante los festejos de fin de año, por lo que suspendieron el concierto del 31 de diciembre en Reforma, donde se presentarían Los Ángeles Azules; además de que se adelantó un día el cierre de la verbena navideña del Zócalo.
“Esperé como cuatro horas, me acaban de entregar mi resultado y salió negativo, pero me voy a seguir cuidando; el fin de año lo pasaré en casa con mi familia para seguirnos cuidando”, contó Miriam, trabajadora de un centro educativo, quien por prevención acudió a solicitar una prueba y optó por cancelar los festejos que tenía planeados.
En los lugares donde las pruebas son gratuitas se reparten apenas 50 fichas todos los días, para las siete de la mañana ya no hay ni una. “El caos es en las mañanas, la gente últimamente ha madrugado porque todos se quieren hacer la prueba, luego llegan como a las nueve o a las 10 y ya no alcanzan, se enojan, pero ni modo ese no es problema nuestro, son las pruebas que nos mandan y ahora se están acabando rápido”, expuso personal del Polideportivo Soluciones, en la alcaldía Benito Juárez.
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Rodrigo gastó los últimos 900 pesos que tenía de su aguinaldo para hacerse la prueba Covid en una clínica particular.
Desde el lunes pasado empezó a sentir alta temperatura, el cuerpo cortado y dolor muscular; para descartar que tuviera la nueva variante intentó durante dos días hacerse una prueba gratuita en los kioscos de salud del gobierno local; nunca alcanzó ficha.
Rodrigo fue uno de los que no alcanzó, “de lo poco que me quedaba del aguinaldo me vine a hacer la prueba. Llevo dos días buscando las gratuitas pero no alcancé y como para que fuera una gripa ya me duró mucho, entonces pues ni modo, a pagar la de PCR aquí. Espero que salga negativo porque tengo que ir a trabajar y ya tenemos listo todo en casa para la cena de fin de año”, comentó el joven.