Un niño de 10 años de Milwaukee apuntó intencionalmente con un arma a su madre, le disparó y la mató porque ella no quiso comprarle un casco de realidad virtual, dijeron los fiscales.
El menor inicialmente le dijo a la policía que el tiroteo del 21 de noviembre fue un accidente, según los cargos criminales obtenidos por el Journal Sentinel. Pero luego dijo a familiares que apuntó intencionalmente a su madre antes de dispararle.
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Asimismo, mientras en un inicio las autoridades policiacas atendieron la llamada al 911 por un supuesto disparo accidental, el adolescente habría confesado haber disparado a propósito, aunque lo habría hecho hacia la pared, para asustar a la mujer de 44 años, quien recibió el balazo al cruzarse frente a él.
En tanto que también habría asegurado que la madre lo despertó temprano ese día, a alrededor de las 6:30 horas, y después se negó a comprar el equipo, que adquirió un día después de la muerte de la mujer, y desde su cuenta de Amazon.
Y es que mientras el caso parecía a un inicio encausarse hacia la teoría del disparo accidental, habría sido la familia del menor quien comunicó a la Policía sus sospechas respecto a cómo ocurrieron los hechos.
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Ello, debido a que el niño ya tiene varios antecedentes de problemas de ira y de conducta, ocurriendo el más reciente hace apenas seis meses, cuando arrojó y encendió un globo lleno de líquido inflamable al interior de la vivienda, dejando daños considerables en la sala de la casa.
Por último, las autoridades apuntaron que, según la confesión del niño, cuya identidad permanece desconocida, a manera de advertencia hacia su madre habría tomado las llaves de la caja de seguridad donde resguardaban el arma, sacándola para después realizar el disparo.
*MG