VIDEO. En Colorado, policía detiene y sube a mujer a una patrulla y la arrolla un tren
Este lunes, una policía de Colorado fue declarada culpable de agresión y peligro imprudente, luego de que esposó a una mujer a un vehículo policial estacionado sobre las vías del tren, sin embargo, fue arrollado por un tren de carga.
Jordan Steinke es la primera de dos oficiales en ir a juicio por el accidente registrado el 16 de septiembre de 2022, sin embargo, fue absuelta de un tercer cargo de intento criminal de comentar homicidio involuntario. Lamentablemente, el accidente dejó a Yareni Ríos-González gravemente herida.
“No hay duda razonable de que colocar a una persona esposada en la parte trasera de un coche patrulla, estacionado en las vías del tren, crea un riesgo sustancial e injustificable de daño por parte del tren”, dijo el juez Timothy Kerns.
En tanto, sobre la evidencia no convención al juez de que Steinke, “a sabiendas, tenía la intención de dañar a la señora Ríos-González”, Stienke había mostrado “conmoción y remordimiento”.
Police abandon handcuffed woman in squad car parked on tracks as train approaches.
— Raf Shimunov (@rafaelshimunov) September 25, 2022
Yareni Rios-Gonzalez, 20, suffered 9 broken ribs, broken arm, broken teeth, head, back and leg injuries, as cops fled.
Paid leave for the cop. pic.twitter.com/PKYKd1QBDP
Por su parte, Steinke testificó que no sabía que la patrulla de otro oficial al que estaba ayudando estaba estacionada en las vías, pero en las imágenes de su cámara corporal se aprecia junto con dos señales de cruce de ferrocarril, pero ella dijo estar enfocada en la amenaza que podría provenir de Ríos y su camioneta.
Además, dijo que puso a Ríos-González en el vehículo del otro oficial porque era el lugar más cercano para retenerla temporalmente, pues no sabía que el tren venía hasta justo antes de que chocara.
Juez halló que Steinke observó las huellas, no “apreció el riesgo”
En el juicio de Steinke no había jurado, en cambio, Kerns escuchó la evidencia y emitió veredicto, mientras que Mallory Revel, abogado de Steinke, no respondió a las solicitudes por teléfono y correo para hacer comentarios.
En tanto, Steinke, que trabajaba para el Departamento de Policía de Fort Lupton, fue acusada de intento criminal de cometer homicidio involuntario, y peligro imprudente y agresión en tercer grado, ambos delitos menores.
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Mientras que, el otro oficial, Pablo Vázquez, trabaja para el Departamento de Policía en las cercanías de Platteville, es procesado por delitos menores de peligro imprudente y delitos de tránsito. No ha presentado una declaración de culpabilidad, y su abogado, Reid Elkus, no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Cabe recordar que, Vázquez detuvo a Ríos-González en un camino rural que se cruza con la autopista 85 después de que fue acusada de apuntar con un arma a otro conductor. Los trenes pasan por vías paralelas a la carretera una docena de veces al día, por lo que el sonido de sus bocinas es común.
Asimismo, Ríos-González sufrió una lesión cerebral traumática, demanda por su tratamiento, más tarde no refutó el delito menor de amenaza, dijo uno de sus abogados, Chris Ponce, que estaba en la corte para ver el juicio. Mientras que, Ríos-González no testificó ni asistió.
Por otro lado, Steinke reveló que colocó a Ríos-González en el otro auto policial temporalmente porque era el lugar más cercano para mantenerla segura, práctica estándar para las paradas de tráfico de alto riesgo, dijo el testigo experto de la defensa Steve Ijames, quien también testificó que, en situaciones peligrosas, los oficiales se concentran demasiado en amenazas y pasan por alto cosas importantes.
Steinke, condujo alrededor de 161 kph en ocasiones en su camino hacia el respaldo de Vázquez, testificó que estaba sorprendida de verlo sentado en su vehículo cuando llegó, en lugar de apuntar con un arma a la camioneta de Ríos-González, ella dijo que, estacionó su patrullero detrás de él y salió porque era la forma más rápida de “meter un arma en la pelea”.
Asimismo, no notó las vías ni el suelo cuando se agachó para detener a Ríos, que estaba arrodillada junto a las vías después de que se le ordenó salir de la camioneta.
Por lo que, cuando el fiscal de distrito adjunto Christopher Jewkes la presionó, Steinke respondió: “Estoy segura de que vi las huellas, señor, pero no las percibí”. Estaba enfocada en la sospechosa y la amenaza potencial que representaba y que estaba “bastante segura” de que la detención terminaría en disparos.
“Nunca en un millón de años pensé que un tren iba a atravesar mi escena”, dijo Steinke.
Por último, la oficina del fiscal de distrito del condado de Weld no respondió a la solicitud de comentarios por teléfono.
Con información de Proceso
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