En las últimas semanas, el estado de Sinaloa ha sido escenario de intensos enfrentamientos entre facciones del Cártel de Sinaloa, resultando en cientos de muertos y numerosos desaparecidos.
Este domingo, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, visitó Mazatlán para abordar la crisis de seguridad en la región.
Durante su visita, Sheinbaum sostuvo una reunión de seguridad y posteriormente participó en un evento de programas para el Bienestar.
Sin embargo, el acto fue interrumpido por familiares de personas desaparecidas que protestaron, exigiendo respuestas y justicia.
“Vivos se los llevaron y vivos los queremos”, clamaron los afectados mientras la presidenta se preparaba para iniciar su discurso.
Sheinbaum prometió hablar con ellos al finalizar el mitin, lo que permitió que continuara con su mensaje.
La violencia en Sinaloa ha alcanzado niveles alarmantes, con más de 400 muertes reportadas en el contexto de la guerra interna entre las facciones del cártel lideradas por los hijos de Joaquín "El Chapo" Guzmán e Ismael "El Mayo" Zambada.
Esta escalada de violencia ha llevado a la renuncia del secretario de Seguridad estatal, Gerardo Mérida Sánchez, tras más de 100 días de enfrentamientos continuos.
Las autoridades han intensificado sus esfuerzos para contener la violencia, incluyendo la detención de líderes y operativos clave dentro del cártel.
Sin embargo, la situación sigue siendo crítica, con ataques armados recientes que han dejado a civiles y militares heridos.
La visita de Sheinbaum se produce en un momento crítico para Sinaloa, donde la inseguridad y el miedo han permeado en la vida cotidiana de sus habitantes.
La exigencia de los familiares de desaparecidos refleja un clamor generalizado por justicia y seguridad en una región sumida en el caos.
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